meditación tántrica
El juego y la risa
No desprecies nunca el poder de la risa y el juego. ¿Quién te asegura que no puedes encender, gracias al juego compartido con tu pareja, esa llama del deseo que el tiempo se ha encargado de hacer más pequeña? El Tantra es profundo y transformador, sí; pero no tiene porqué resultar algo serio o aburrido.
Baile y Tantra
Todos podemos bailar. No importa nuestra edad. La música está ahí, esperándonos, dispuesta a hacer que nuestros cuerpos se muevan. El baile despierta los chakras, hace que se activen y te hace sentir vivo. Un baile sensual, no hace falta decirlo, enriquece nuestra sensualidad.
Naturaleza y Tantra
La naturaleza tiene mucho que enseñarnos sobre nuestro propio cuerpo y sobre las energías sutiles que operan en las profundidades del mismo. Las meditaciones tántricas que venimos proponiéndote aquí proporcionan un punto de entrada al mundo divino de la pareja, un mundo de belleza y sensualidad que puedes disfrutar y celebrar con tu pareja.
Un baile erótico para despertar tu sexualidad
Las prácticas y meditaciones tántricas deben ser entendidas como puertas de entrada a una mayor conciencia, un modo fantástico para despertar y estimular unos sentidos que acostumbramos a tener dormidos. El baile es uno de los mejores modos que tenemos de hacerlo. El baile tiene la facultad de encender en nosotros poderosa fuerza sensual que recibe el nombre de “energía kundalini”.
El auto-placer femenino
En el mundo tántrico, la vagina recibe el nombre de yoni. Yoni significa “cueva de las maravillas”. El nombre le viene de perlas. Son muchas las maravillas de placer que tú, mujer, puedes encontrar en tu vagina y en los rincones de su compleja anatomía. El auto-placer, qué duda cabe, te ayudará descubrir y a experimentar con todo lo que tu cuerpo en general y tu yoni en particular pueden ofrecerte.
El auto-placer masculino
Cuando nos movemos en el universo tántrico, el auto-placer no es otra cosa que un camino que escoge uno mismo para abrir los canales de energía que tenemos en el cuerpo para que dicha energía fluya por ellos. Abriendo esos canales, seremos más conscientes de las sensaciones que tengamos y de la respuesta que nuestro cuerpo da al placer y al tacto. La activación de nuestros chakras hará que nos sintamos completamente vivos.
Auto-exploración y Tantra
Hay algo que nunca hay que olvidar: sólo cuando uno está a punto de reventar de vitalidad y felicidad puede dar lo mejor de sí mismo a los demás. La autoestima y la buena imagen que uno tenga de uno mismo es la base para tener una apasionada vida sexual. Cuando se está rebosante de salud, positivismo y confianza en uno mismo es cuando se puede iniciar un camino tántrico realmente gratificante.
Telas y objetos para el espacio sagrado tántrico
¿Tú y tu pareja queréis tener la sensación, en vuestra unión, de encontraros en el interior de un útero, aislados de todo, mimados y alimentados, sin necesidad de nada del exterior? Para conseguirlo es fundamental que, el espacio en el que os encontréis, te haga sentir absolutamente cómodo y seguro.
Dando color y aroma al espacio sagrado tántrico
El color es una huella de la energía, y viene a nosotros a caballo de las ondas lumínicas. Igual que las notas musicales, cada sombra y cada color tienen su propia vibración. Somos seres de energía, así que nos hacemos irremediablemente eco del color de una manera muy personal y siempre en función de nuestra propia calidad vibrativa.
El espacio sagrado
El espacio ideal para las meditaciones tántricas debe ser una especie de oasis de paz y tranquilidad alejado del resto del mundo y aislado de él. Este espacio puede ser una habitación o un rincón tranquilo, un espacio sagrado que sirva para transportar mente y espíritu lejos de la vida cotidiana y de sus preocupaciones.
La liberación emocional por el Tantra
Liberarte de los aspectos emocionales de tu pasado es una parte importante de tu camino tántrico. Hacerlo te permite avanzar en tu relación. Identificar, expresar y comprender tus emociones te permitirá, a la larga, dar un nuevo sabor a tus relaciones sexuales.