Secretos orientales
No sorprenderemos a nadie si afirmamos que las culturas orientales son las más refinadas a nivel mundial en cuanto a tratamiento de todo lo referente a la sexualidad. Sus textos milenarios demuestran hasta qué punto lo sexual ha ocupado un lugar central en las inquietudes de los seres humanos de China, Japón, la India, etc. Uno de esos textos milenarios es el que se conoce como Secretos de la Cámara de Jade. En ese texto, escrito hace más de 3.000 años, se señala cómo sería deseable que el hombre realizara a diario ejercicios para aumentar su potencia sexual y conseguir nuevas sensaciones sexuales que fueran más allá del momento gozoso y breve del orgasmo.
Entre los ejercicios señalados en los Secretos de la Cámara de Jade para que el hombre aumente su potencia sexual están aquellos destinados específicamente al pene. Los ejercicios para el pene estaban especialmente recomendados para conseguir un pene fuerte y poderoso. Esos ejercicios deberían convertirse en una alternativa interesante a la masturbación. El objetivo es conseguir con ellos que una agradable sensación de hormigueo recorra al cuerpo en el momento del orgasmo. Ese hormigueo sustituiría el breve placer de la eyaculación.
Los ejercicios para el pene de los Secretos de la Cámara de Jade deben servir para mejorar la vitalidad sexual y para aumentar el placer sentido durante el acto sexual.
¿Cómo realizar los ejercicios para el pene?
Para empezar a realizarlos es importante estar completamente desnudos y cómodos, sentados o acostados en un ambiente cálido. Frotarse las manos y pasarlas por encima del pene durante un minuto debe servir para conseguir ese punto de relajación desde el que van a comenzarse a realizar los ejercicios para el pene.
Cuando haya pasado ese minuto, cógete los testículos con la mano y apoya el pulgar en la base del pene. Cierra los ojos y paladea el dulce calor y la presión que tu mano ejerce sobre tus genitales.
Coloca tu mano izquierda en la zona púbica, justo por debajo del ombligo, y, con la mano, traza 81 círculos en sentido horario intentando transmitir con ella un sentimiento cálido y sensual.
Cuando hayas trazado todos esos círculos, intercambia tus manos y traza otros 81 círculos, esta vez en sentido anti horario. Siente cómo el calor crece y se extiende.
Finalizados los círculos, coloca las manos sobre tu regazo y contrae los músculos del perineo (los músculos que se encuentran entre el escroto y el ano) y mantén la contracción durante todo el tiempo que te encuentres cómodo. Mientras lo haces, concéntrate en disfrutar de la gratificante sensación de hormigueo que se va extendiendo por todo tu cuerpo.
Fortalecimiento del tallo de jade
El tallo de jade es, en los libros eróticos chinos, el pene. Fortalecer el tallo de jade es, pues, fortalecer el pene. Las instrucciones que se dan para conseguirlo son diversas. Por ejemplo, una de las costumbres más habituales en la China tradicional consistía en la utilización de una especie de pesas para que el hombre fortaleciera los músculos del pene. Dos pequeñas pesas atadas por una cuerda corta y de tacto suave servían para que el hombre, colocando la cuerda sobre la base del tallo de jade erecto, realizara esos ejercicios para el pene orientados a reforzarlo.
Empujar con el pene erecto contra un recipiente lleno de arena era otro ejercicio habitual destinado al fortalecimiento del pene. Estos ejercicios, que se iniciaban con 20 zambullidas del pene en el depósito de arena, debían llegar a alcanzar las 100 zambullidas.
En la actualidad, los ejercicios más recomendados para aumentar la potencia sexual y conseguir retardar la eyaculación son los llamados ejercicios Kegel. Estos ejercicios son la vertiente contemporánea de los ejercicios de cuerda o arena de la antigua China. De fácil realización, sólo se exige constancia y dedicación para que los ejercicios Kegel den sus frutos.
Para realizarlos, basta con contratar y relajar de manera continuada los músculos que contraeríamos para detener el flujo de orina. Combinar las contracciones intensas y las moderadamente intensas es fundamental para que los ejercicios Kegel hagan su efecto. ¿Cuántas veces al día hay que realizar estas contracciones? Entre 40 y 60 veces.
Realizando a diario y de manera sistemática los ejercicios Kegel conseguirás tener un control efectivo sobre tu eyaculación. Controlándola, tus experiencias sexuales serán más largas y placenteras.