Placer para todo tipo de parejas
Si hay un juguete erótico que puede convertirse en una maravilla y en un camino garantizado hacia el placer tanto para parejas gays como para parejas lesbianas o heterosexuales ése es, sin duda, el dildo doble. Él puede permitir que dos hombres disfruten al unísono del sexo anal. Él puede hacer que dos mujeres disfruten al mismo tiempo de una penetración anal, vaginal o combinada. El dildo doble ofrece la posibilidad de que una pareja heterosexual pueda organizarse para disfrutar analmente al mismo tiempo o para que la mujer lo haga vaginalmente mientras el hombre lo hace analmente.
El dildo doble, por otro lado, ofrece una posibilidad extraordinaria de placer a todas aquellas mujeres que gusten de masturbarse. ¿Qué mayor placer para una mujer aficionada a la masturbación que servirse de un dildo doble para, al mismo tiempo, masturbarse anal y vaginalmente? Sin duda, la de la doble penetración es uno de los mayores placeres que puede experimentar una mujer. Para hacerlo en soledad, nada mejor que servirse de un consolador doble que tenga la suficiente flexibilidad como para permitir que el mismo dildo sirva para introducirse en la vagina y en el ano al mismo tiempo. La industria del juguete erótico, conociendo hasta qué punto la mujer desea poseer un instrumento de placer de este tipo, elabora dildos dobles con diferente grosor en cada una de sus puntas.
Como siempre que hablamos de cualquier tipo de penetración anal, hay que tener siempre presente una peculiaridad estrictamente natural del ano. Esa peculiaridad es la falta de lubricación natural. El ano no se lubrica solo. El ano no es una vagina que segrega humores lubricantes. El ano, para estar lubricado, debe serlo con lubricantes externos a él. El uso de lubricantes artificiales es imprescindible cuando se habla de penetración o estimulación anal. Bien sea con el dedo, bien con un pene, bien con un dildo, vibrador o consolador, la penetración anal exige el uso de un lubricante, una correcta y esmerada estimulación y un ritmo y presión adecuados.
Al hablar de una correcta lubricación anal no nos estamos refiriendo, en modo alguno, al uso de la saliva humana como lubricante. Más allá del placer que pueda producir el beso negro, esta práctica sexual en la que uno de los miembros de la pareja se sirve de su lengua y sus labios para estimular el ano del otro, y de la tarea de estimulación que pueda cumplir, la saliva no sirve como lubricante.
Seguridad e higiene
Una de las reglas de oro que hay que acatar a pie juntillas al usar un dildo doble (sobre todo si es compartido) es la de combinar su uso con el uso de preservativos. Colocar un preservativo al dildo doble servirá para disminuir el riesgo de transmisión de algún tipo de enfermedad de transmisión sexual o ETS. Una vez haya sido penetrado uno de los miembros de la pareja, y antes de proceder a otra penetración, el preservativo debe ser retirado y sustituido por otro.
Este uso del preservativo debe combinarse, también, con un exhaustivo cuidado y limpieza del dildo. Una limpieza concienzuda del dildo doble con agua tibia y un jabón íntimo natural debería bastar para limpiar un dildo doble que haya sido utilizado con preservativo. Es importante remarcar que el uso de un jabón natural es absolutamente prescriptivo. Las mucosas íntimas del ser humano (tanto de vagina como de ano) son muy sensibles y el uso de un jabón demasiado agresivo puede causar molestias en caso de que el dildo fuera utilizado sin preservativo.