Los siete chakras
De un tiempo a estar parte venimos recomendándoos en Eromasaje algunas danzas de carácter tántrico que sirven para intensificar la relación entre los miembros de la pareja y para liberar las energías reprimidas de nuestro cuerpo. La llamada danza de los principios tántricos sirve, por ejemplo, y tal como vimos en el artículo dedicado a ella, para incrementar la energía Kundalini. En esta ocasión vamos a proponerte una danza que va a servir para que, de una manera individual o en pareja, se desbloqueen y carguen de energía los chakras.
Antes de proceder a enumerar los pasos que hay que dar para realizar la danza de los siete chakras vamos a repasar cuáles son esos chakras que debemos desbloquear mediante esta útil danza tántrica.
Los chakras, puntos de concentración de energía en el cuerpo, se distribuyen a lo largo de la columna vertebral, desde la coronilla hasta el coxis. En total, son siete los chakras que se pueden encontrar en el cuerpo. Dichos chakras son los siguientes:
- El primer chakra, chakra raíz o chakra base está ubicado en el coxis, en la base de la columna vertebral, en el perineo, bajo la zona genital. Si buscáramos una relación entre este primer chakra y nuestro organismo lo encontraríamos con el aparato digestivo inferior, las glándulas suprarrenales y la columna vertebral.
- El segundo chakra se encuentra en la zona baja del abdomen, bajo el ombligo, y está ligado físicamente al sistema urinario, al bazo, a los ovarios, a la próstata y a los testículos.
- El tercer chakra está ubicado por encima del ombligo, en el área del estómago y se conecta física y directamente con el aparato digestivo superior, la vesícula y el páncreas.
- El cuarto chakra está situado en el centro del pecho. El corazón, los pulmones, el hígado y los sistemas circulatorio e inmunológico son los órganos y sistema directa y físicamente relacionados con este chakra.
- El quinto chakra está ubicado en la zona de la garganta. Este chakra está relacionado físicamente con las cuerdas vocales y con el oído, los pulmones, la garganta y los bronquios. Este chakra está directamente ligado con el sistema linfático y la tiroides.
- El sexto chakra está situado entre los ojos y está físicamente conectado con el sistema nervioso, la glándula pineal, los senos paranasales y el sistema endocrino.
- El séptimo chakra. Ubicado en la coronilla, este chakra se relaciona con la glándula pituitaria y el cerebro.
Los pasos de la danza de los siete chakras
Identificados los chakras, veamos los pasos que hay que seguir para, mediante la danza de los siete chakras, ir desbloqueando cada uno de ellos.
La danza de los siete chakras se inicia cuando, tras escoger una música agradable para la persona o personas que vayan ejecutar la danza, ser realizan rotaciones de la pelvis hacia delante y hacia atrás. Cuando se realiza ese movimiento se imita el trazo que realizaría una mano para dibujar la figura de un ocho. Mientras se realiza este movimiento se deben realizar también movimientos sensuales que impliquen a la zona genital. En cierto modo, los movimientos de esta fase de la danza de los siete chakras deben recordar a los movimientos que se realizan cuando se hace el amor.
A continuación, y liberándose de las rigideces que puede imponer la vergüenza, se agregarán a la zona del ombligo movimientos hacia atrás y hacia delante.
A partir de este momento, quien realice la danza de los siete chakras deberá integrar a los movimientos anteriores movimientos de apertura de brazos y pecho. Tras ellos, será el cuello quien deberá empezar a girar. Los movimientos, suaves (el cuello es una zona delicada del cuerpo y cualquier traumatismo o contractura en el mismo puede acarrear molestas y serias consecuencias), deben realizarse hacia los costados y hacia delante y hacia atrás.
Al llegar a este punto de la danza de los siete chakras, quien efectúa el baile debe percibir cómo la más absoluta libertad se apodera del cuerpo, que se amolda, entero al ritmo de la música. Mientras percibe dicha libertad, quien baila debe concentrar su atención y su energía en la zona del sexto chakra (o sea: en el entrecejo).
Llegada aquí, la persona que ejecuta la danza de los siete chakras debe aminorar el ritmo de la danza para centrar y concentrar su mente en una idea: la de la fluidez. Concentrada en esa idea y pensando que todo se mueve hacia la armonía, la persona que realice la danza de los siete chakras deberá ir abandonándola poco a poco.